Vamos a pegar un giro y cambiar un poco. Esta vez le toca a una fotógrafa más experimental. La conocí el año que ganó la beca Albarracín. No es muy habitual que se lleve la beca un trabajo eminentemente conceptual. Así es que este trabajo, destacaba mucho entre todos los demás, pues eran todos documentales. Desde entonces la sigo y me flipa como utiliza el autorretrato para hablar de lo que más le preocupa. Sus fotografías siempre nos lanzan un mensaje, y siempre ese mensaje trata de problemas muy cercanos a ella. Pero vamos a verlo.

Origen:

La aventura comienza en el instituto, con mi profesor de dibujo técnico que monta un laboratorio analógico en uno de los baños y nos enseña el funcionamiento de una cámara. A partir de ahí la cámara me acompaña allá donde voy.

Qué significa para tí la fotografía

Respirar. Oxigena mi cabeza y me ayuda a relacionarme con el mundo. Observar siempre ha sido una de mis pasiones y la fotografía me permite rescatar esos momentos, esos gestos e ir más allá de la imagen exterior e intentar captar el interior de la persona que fotografío.

¿Qué tipo de fotografía haces?

Mi pasión por conocer nuevas culturas y países, centran mi fotografía en el retrato, en un comienzo el retrato de calle, de viajes, robado. Durante años la calle es mi lugar de trabajo, los conflictos sociales, los actos culturales, conciertos, teatro…
En 2019 comienzo mis estudios de Técnico superior de fotografía, donde experimento y me engancho con la fotografía de moda y producto.
Entonces llega el confinamiento sufrido durante la pandemia, lo que me lleva a reinterpretar mi fotografía, comenzando a utilizar el autorretrato para mostrar mis vivencias, denunciar problemas, abusos y agresiones que sufren muchas personas en esta sociedad.
Actualmente el retrato y autorretrato son la base de mis proyectos.

¿Nos hablas de tus referentes?

Un día tropecé con una fotografía de Isabel Muñoz y me enamoré de aquella imagen y de su trabajo. Junto a ella Pierre Gonnord, Flor Garduño, Patty Maher, Sally Mann. Podría hacer una larga lista, ya que cada proyecto me lleva a conocer nuevos referentes que aportan a mi fotografía.

¿Cual es tu objetivo?

Antes disparaba por instinto animal, ahora mi fotografía es más pausada, más pensada, me lleva mucho tiempo desarrollar una idea hasta que comienzo a disparar.
Creo en la capacidad de la fotografía para concienciar, sanar y educar ante muchos de los problemas que vivimos en la actualidad.

Inerme

Del lat. inermis.

1. adj. Que está sin armas. Indefenso. U. t. en sent. fig.
2. adj. Biol. Desprovisto de espinas, pinchos o aguijones.

El proyecto narra mi vivencia personal con el acoso laboral a través de autorretratos, con el miedo que supone exhibirse ante el público con una herida sin cerrar.
Hay temas que cuesta mucho poner en palabras, para los que la comunicación escrita no basta, sin embargo, la fotografía es el lenguaje que se pone al servicio de la denuncia de la víctima.
Utilizo la fotografía como medio de expresión para evidenciar el daño que sufre la víctima, su silencio, las reacciones y consecuencias que tienen en la persona estos actos. Una forma de mostrar desde el interior los sentimientos y el daño que hay que reparar.
Nos habla de las esperas sin saber cómo será la siguiente agresión, del aislamiento laboral, social y familiar, del sentimiento de culpa, de los testigos mudos, más dañinos, a veces, que quien inflige el gratuito castigo, de la soledad, agotamiento, enfermedades psíquicas y físicas, depresión, etc.
En las imágenes, el agresor está ausente, no se muestra, y sin embargo, es omnipresente en el abrumador vacío que envuelve la pequeñez de la víctima. Ese espacio angustioso nos transmite ahogamiento, la sensación de que no hay aire como apenas hay una salida al acoso. Y lejos de encontrar una escapatoria, a través de las imágenes se nos obliga a mirar de forma estática, a identificarnos con la víctima y que cada imagen sea como una losa, que va pesando, una carga que se arrastra hasta el final para ponernos en la situación del testigo que nunca más debiera de ser mudo.
Inerme está enfocado a todas las personas en edad laboral. Sin géneros, sin distinciones de ningún tipo, todos son factibles de sufrirlo, o en algún momento ser testigo de este tipo de agresión en su entorno laboral. Ayudar a identificarlo, entender a la víctima, son los principales objetivos de este Proyecto.

Bío

Flor Aldea, Burgos (1966)
Los temas sobre los que versan mis proyectos fotográficos son reivindicaciones de los problemas que me rodean, y especialmente el registro documental de todo tipo de violencia, tanto estructural como personal: social, de género, laboral etc.; así como las marcas psicológicas y físicas que esas violencias dejan en las víctimas.
Desde el año 2013 realizo diferentes exposiciones individuales, Thai, Nosotras, Nostalgias, Retratos de un Payaso… También participo en exposiciones colectivas (“La cámara”, “Gremios”) en el Centro de Arte Caja Burgos. Colaborando en El proyecto “Descosiendo violencias, Creando dignidades” comisariado por Sara Tapia contra la violencia de genero. Etc.

Estos son algunos de los reconocimientos que he tenido:

Descubrimientos Photoespaña 23. Seleccionada visionado presencial.
Expositivos 23. León es Photo. Finalista. 2023
Beca Albarracín 2021. XX Seminario de Fotografía y Periodismo
Selección Galeria PhotoEspaña, «Visit Spain» 2021
IX Certamen de Fotografía “Miradas por la Igualdad”. Segundo Premio. Concejalía de la Mujer Burgos. 2013.